martes, agosto 01, 2006

violencia de género

Hoy nos hemos vuelto a concentrar en el Born de Palma para manifestar nuestra rotunda condena y dolor por la muerte de Katarina Buechler a manos de su compañero sentimental Rudolf Eberhard M.
Este hombre de 71 años, ha reconocido ante el juez haber asesinado el domingo 23 de julio, de un disparo a bocajarro a su compañera sentimental, Katarina, de 63, en el domicilio que la pareja compartía desde hace diez años en la localida de Cala Murada, en Mallorca.
No podemos consentir estos asesinatos. Es necesario mantener un rechazo firme y constante contra la violencia de género, que a día de hoy, ya ha supuesto la muerte de 41 mujeres en el estado Español durante el año 2006. Katarina es la segunda mujer asesinada en Mallorca este año.
La violencia de género es la que se produce como consecuencia de las desigualdades entre géneros, generalmente por parte del hombre hacia la mujer. Para poner fin a este problema no basta simplemente con una legislación dura, hace falta la participación de diferentes sectores y de comunidades enteras. Hace falta una educación no sexista, hace falta un cambio de mentalidad.
Hace no mucho leía un estudio sobre el tema de la violencia de género en institutos de secundaria, y de este estudio se concluía que solo un 30% de las adolescentes sabían detectar a un maltratador. A preguntas tan claras como “¿considerarías normal que tu novio te dijera que llevar minifaldas es de putas?” solo una minoría contestó que no.
Está claro que para acabar con esta lacra social hace falta mucho más que una ley (que por supuesto también es imprescindible), hace falta un cambio social.
Una anécdota: después de la concentración, unas cuantas personas, en su mayoría mujeres, hemos ido a tomar algo a un bar cercano, cuando estábamos allí sentadas, han pasado por detrás de mí un par de chicos que no deberían pasar de los 25 años, y uno le comenta al otro en un tono que me ha parecido bastante despectivo: “joder tío, aquí está lleno de marujas”.